The Hobbit

J.R.R Tolkien es un autor clásico, sobre todo a lo que se refiere a la fantasía. Pero para ser sincera, yo escuché de Tolkien ya un poco grande, nadie en mi casa era fan del autor, luego de que salieron las películas de "The Lord of The Rings", y presté atención a las historias escritas por Tolkien, me sentí atraída por ese mundo, aunque debo confesar, que he fallado en leer la trilogía del señor de los anillos, así que cuando anunciaron la adaptación de El Hobbit, decidí a leerme este libro.
El Hobbit es un libro lleno de aventuras, magia, amistad y descubrimiento personal. La evolución de Bilbo, de un Hobbit asustadizo y reacio al cambio, a ser el que salva al grupo de enanos con los que viaja en más de una ocasión , es algo que siempre gustará leer.
Las aventuras que emprenden los enanos con Gandaf, y Bilbo hacen que se crea una gran amistad entre ellos y que los personajes tengan oportunidad de ser sus propios héroes, descubrir sus límites, y saber hasta dónde llegarían por ayudar, o salvar a la gente que les importa, o luchar por causas en las que creen.
Tolkien creo un mundo en donde no sólo había que luchar contra el mal traído por los hombres, su avaricia y sed de sangre, sino también con los de monstruos mitológicos que tan bien supo adaptar en la historia, creando así, un mundo donde dragones, hechiceros, enanos, hombres, hobbits, trolls, elfos y otras clases de animales y seres, crean una aventura llena de elementos fantasiosos y mágicos que te dejan soñando con un mundo lleno de estos.

The Black Dagger Brotherhood/ La hermandad de la daga negra

Pues bien, yo no acostumbro a leer este tipo de libros, usualmente me inclino por libros y autores clásicos, pero bien, hace unos meses unas amigas me comentaron acerca de esta saga de libros y me llamó la atención así que decidí leer a ver cuál era el alboroto en las redes sociales con estos libros.
El primer libro fue un poco lento pero me gustó porque presentaba una alternativa diferente al tema de los vampiros y sus orígenes y la vida entre humanos. Wrath y el resto de la hermandad parecían un conjunto de hombres/vampiros extraordinarios y no sólo por el hecho de ser vampiros, sino por haber sido especialmente creados para la defensa de su raza que se ve amenazada por los Lessers, quienes solían ser humanos pero intercambiaron sus almas al Omega a cambio de una vida más larga y extra fuerza (que necesitan para poder enfrentarse a la hermandad). La Scribe Virgen y el Omega son en realidad hermanos, y por envidia del Omega acerca del poder de su hermana y su creación (los vampiros en estos libros se pueden reproducir pero la natalidad es muy baja y los embarazos son muy peligroso para la madre) empieza a crear a los Lessers para acabar con los vampiros. Todo esto se va sabiendo a medida que la historia va avanzando y se van conociendo mejor cada uno de los hermanos.
Hay ciertos aspectos de las relaciones que se manejan de forma estándar con respecto a las historias de vampiros, la necesidad por la sangre, la posesividad sobre la pareja, el apego del vampiro masculino una vez que ha hecho la conexión con su pareja (bonded male), y lo peligoso que puede ser si es apartado de ella o si otro vampiro intenta acercarse demasiado. Hay ciertos aspectos divertidos en la historia, y es que a pesar de cuan diferente esta raza es presentada en algunos aspectos con respecto a los humanos, se representan como vampiros con profundos sentimientos, tanto de amor como de odio. Su sed de venganza y agresividad es muchísimo más alta que la de los humanos u otros vampiros que no tengan sangre de guerreros en ellos.
Otra cosa que me gustó mucho de esta saga es como a pesar de tener muchas escenas de sexo, siempre lleva a algo importante, no es sexo por sexo, indica una conexión o un descenlace en la historia, me gusta como se manejó el tema del BDSM en el caso de Vishous (que es mi hermano favorito) y se incluyen relaciones homosexuales, o se aluden a ellas en una forma muy casual y sin rayar en algo trillado.
Quizás no sean los mejores libros que haya leído, pero definitivamente son altamente adictivos, y no me arrepiento de haberlos leído y ser ahora una fan de esta saga de vampiros.

Era cierto, alguna vez se había sentido vivo, lleno de energía, vibrante y completo, sin embargo, esos tiempos formaban parte de su pasado. Su presente estaba nublado por una amargura e infelicidad que eran capaces de cubrir cada centímetro de su ser.

A veces pasaba horas mirando por la venta, nadie sabe qué, pero siempre parecía estar concentrado en algo que estaba del otro lado de la ventana, quizás no era nada, o quizás era todo.

“Escritos de un Viejo Indecente” Charles Bukowski

Hace algunos días leí un libro de Bukowski, ya había leído algunos de sus poemas y extractos de algunos de sus libros. Leer “Escritos de un Viejo Indecente”, que es más una recopilación de algunas de sus columnas en algunos periódicos de su época en una forma autobiográfica.

A pesar de que realmente no tenía mucho tiempo leyendo libros o poemas relaciones con Charles Bukowski, siempre estuvo la curiosidad por su obra, siempre había leído algunos comentarios y críticas acerca de su obra, así que tomar en mis manos un libro de él fue un poco como “darle al cuerpo lo que pide”, entonces comencé a ojear las páginas del libro y me di cuenta de que a veces el ser directo y crudo (como es el mundo) funciona. 

Funciona usar tu experiencia en trabajos malos, tus miedos, tus inseguridades y pintar con una paleta de  colores infinitos sobre un papel en blanco. La vida nos da diversidad para escribir, nos da libertad para retratar de alguna forma nuestras experiencias. Bukowski me parece que era un tipo con una mente peculiar, algo borde y hasta un poco áspero, pero creo que tenía su razón de ser, y es que vivir la vida que él llevaba no podía hacerlo de otra forma más que crudo, directo, cínico, pero con algo de humor (negro, pero humor al fin).

Bukowski era un tipo que se reía con ironía en la cara de la vida, intentando apaciguar de alguna forma su mente y sus problemas. La vida está llena de desilusiones, de cosas horribles, pero también de cosas por las que valen la pena vivir. Bukowski, sólo reflejaba eso en la forma en que mejor pudo, sin cubiertas, sin endulzarlo, supongo tuvo que haber sido ese tipo de persona que simplemente está como en tu cara, de esos que no pasa inadvertidos ni por error.

Finalmente incluyo una cita de Charles Bukowski:

“Estamos aquí para desaprender las enseñanzas de la iglesia, el estado y nuestro sistema educativo. Estamos aquí para tomar cerveza. Estamos aquí para matar la guerra. Estamos aquí para reírnos del destino y vivir tan bien nuestra vida que la muerte tiemble al recibirnos.”

No soy del este del este.

La cantidad de comentarios (la mayoría burlándose) del “documental” “Caracas, una ciudad de despedidas” me impulsan a escribir algo acerca del tema, y es que no sólo los comentarios, después de que yo misma viera el entredicho documental, me quedé pensando, ¿somos así todos los jóvenes de Venezuela?, ¿somos tan banales?

Me di cuenta de que obviamente muchas veces uno presta atención a cosas que no le parecen importantes en el momento, pero que a la larga no lo son, le prestamos atención y le dedicamos tiempo a cosas a las probablemente, no deberíamos. Pero en realidad ¿quién no hace eso?, creo que la cuestión está en no centrar tu vida o tus propósitos en esas cosas. Como Ernesto Sábato dijo: “La vida es tan corta y el oficio de vivir tan difícil, que cuando uno empieza a aprenderlo, ya hay que morirse.”
Creo firmemente que así como hay miles de cosas que funcionan mal en el país, hay muchísimas personas capaces y que quieren trabajar para cambiarlas.

Me parece que la imagen que se presenta en el dichoso documental, es una imagen totalmente errada del sentir de la juventud venezolana, el hecho de que mucha gente vea la posibilidad de tener una mejor calidad de vida fuera del país, ya sea por la inseguridad, problemas políticos o económicos que tenemos en estos momentos, no creo que sea porque “quiero caminar a las tres de la mañana por la calle con mi ipod” o algo así, como hacen ver los niñitos estos, que lo que quieren es irse a beber a un local y pasársela “brutal”, creo que el poder del cambio está en los jóvenes, pero si contamos con jóvenes como esos, no hay por qué preguntarse por qué tenemos el gobierno que tenemos. El problema más grave y que más me molesta con respecto a la gente y la situación del país, es la creciente indiferencia “si no me afecta directamente, no me interesa.”

Los crecientes problemas en todo el país, en todos los aspectos y estratos, me hacen pensar que sí, que quizás tenga un mejor futuro fuera del país, ¿que si no me daría una pena enorme tenerme que ir? Obviamente que sí, pero si me quiero ir no es porque “tengo una necesidad de conocer mi ciudad a los 22 años de edad que tengo”, las razones por las que me quisiera ir son otras, lamentablemente hay una creciente “cultura” por la falta de cultura, veo con tristeza cómo la gente se inclina por una vida llena de banalidades y cosas vacías, todo es cuestión de “verse bonita”, a nadie parece interesarle buscar una forma de superación, más que la física. Estamos en una sociedad machista en la que tienes que ser bonita y tonta, si no eres bonita y no te haces la tonta, no vales la pena, y no lo digo sólo en el aspecto de relaciones amorosas, lo triste es que eso se ve en otras esferas de nuestra sociedad, hay algo podrido y ese algo podrido somos nosotros como sociedad.

Es triste ver cómo tu país pasa de mano en mano, mientras es desgarrado por personas sin escrúpulos, lo peor es sentirse que no sólo es el país lo que se está perdiendo si no tú como persona.

Si me iría, no sería por cualquiera de las razones estúpidas que dieron los niñitos esos, que no saben nada de la vida, no hay que ir muy lejos para ver la situación tan penosa que vive la mayoría del país, sólo toca abrir un poco los ojos y ver más allá del “este del este”.

¿Cómo saber lo que realmente quieres?

Recuerdo cuando estaba en bachillerato, no parece tanto tiempo atrás, y tenía decidido qué quería hacer y en quién me quería convertir. Al graduarme de bachiller, la realidad me abofeteó en la cara, es como que si durante el tiempo que estuve en la escuela hubiese vivido en una burbuja, y de repente la vida me estaba diciendo que esa fue una realidad que no volvería y que, quizás después de todo, no fuese tan real.

Desde entonces, tengo problemas en saber qué es lo que realmente quiero hacer, qué me gusta o en quién me gustaría en convertirme. Siento que la vida se me está pasando y no estoy haciendo nada productivo o que me guste, es un pensamiento que me atormenta todos los días, incluso cuando no lo pienso concientemente, está ahí, subconscientemente haciéndome sentir inútil y sin valor.

El problema es que, realmente no me importa tanto llenar las expectativas que las demás personas tengan hacía mí, el problema son las expectativas que tuve/tengo de mí misma, creo que ya ni siquiera tengo expectativas, simplemente siento que nunca me convertiré en una "mejor versión" de mí misma, siento que esto es todo lo que jamás podré ser, y eso... No sé a ustedes, pero a mi me frustra y me hace sentir inconforme con todo lo que hago. Quisiera dejar de sentirme así todo el tiempo, porque igual, hay muchas cosas que podría hacer, pero siento que ninguna las hago bien. La mayoría del tiempo me pregunto si con ciertas cosas, valdrá la pena si quiera el intento.

¿Qué quisiera escribir?

He estado muy activa desde el año pasado en el blog, quizás tenga que ver con que decidí empezar a escribir de nuevo, para así tener una forma de distraerme de mis problemas e inseguridades. Pues bien, he estado pensando en qué clase de cosas me gustaría escribir, o más bien qué clase de cosas me gustaría que la gente sintiera cuando lee lo que escribo.
¿Qué me hizo pensar en esto?
No estoy muy segura, quizás el hecho de que me encanta leer, y siempre siento algo diferente con respecto a cada libro que leo, siempre desata algún tipo de emoción en mí, quisiera poder escribir algo que haga sentir así a la gente con respecto a los personajes que creo, que les gusten, que los odien, que se sientan identificados, casi que los sientan reales; quisiera que los adaptaran a una especie de realidad paralela. Quiero crear personajes que muevan a la gente de alguna forma.
Eso es algo muy difícil, ningún escritor sabe bien cuál es la combinación exacta para que esto pase, empezando porque cada persona siente diferente con respecto a lo que lee. Yo misma no me siento escritora, siempre ha sido algo que me ha gustado y que he compartido algunas veces con ciertos amigos, este blog como ya lo he dicho en posts anteriores lo hice con ese propósito, de compartir las cosas que escribo, aunque la mayor parte del tiempo no publico lo que escribo, no creo que sea tanto el 'miedo a la crítica' si no más bien un asunto de confianza en mi misma, nunca logro estar conforme con las cosas que escribo, tampoco pretendo que me digan que todo está perfecto o que soy una escrito para escribir un libro 'bestseller', pero supongo que de alguna forma todas esas historia que se me ocurren y que están sin contar, tienen que encontrar su propia forma y realidad, entonces, pues, ese es el real propósito de este blog.
No estoy segura si realmente algún día llegaré a llenar mis expectativas con respecto a lo que escribo o no, pero siempre es un buen punto el tener eso en mente.